Soy Tabs Con 140 Caracteres es mi forma de decir que voy a contar mi historia retro como cuando Twitter usaba 140 caracteres por Tweet, y quisiera empezar diciendo que soy trailera divergente, con corazón de tortilla y kernel de código abierto, tal vez una forma muy poética de decirlo, pero en otras palabras soy mujer trans, lesbiana, empresaria, programadora y trailera y aquí pondré algunas historias sobre mí, algunos pensamientos, lo que me pasa y una que otra cosilla más.
Estudié desde la primaria hasta posgrado en escuelas católicas, la carrera la hice en Ingeniería en Sistemas Computaciones, tengo dos especialidades y una Maestría en Ingeniería, así como dos diplomados, en Finanzas y Desarrollo de Recursos Multimedia.
Me gusta muchísimo programar, llevo desde el 2007 construyendo una pequeña empresa de desarrollo de software con ideales OpenSource, ha sido una experiencia muy bonita y estresante, pero gratificadora de la mejor manera que puede ser emprender.
Soy trailera porque llevo desde el 2013 metida en el negocio del transporte por medio de trailers quinta rueda y remolques. Actualmente tengo un emprendimiento en esta rama en alimentos, mucho más estresante que la primera empresa.
Creo que esto de emprender no es algo fácil, he intentado varias ideas de negocio que no se me han dado, he hecho negocios como vending machines, software as a service, venta de maíz nixtamalizado, y muchas que me hicieron perder, pero también aprender.
Tengo una hija que hoy tiene dos años y dos meses, es el amor de mi vida, adoro pasar tiempo con ella y verla crecer, me dice papá y su nombre es Emilia. Esta en una escuela Montessori y voy a sus eventos y presentaciones apoyándola y viéndola aprender nuevas cosas. Siempre me preguntaban si le iba a decir a mi hija la verdad sobre mi afición de “vestirme de mujer” les decía que no va a haber razón de decirlo o explicarlo porque se ve, y lo que se ve no se juzga, así soy y así vivo diario.
Mis días los empiezo siendo yo y termino siendo yo una mujer trans, nadie más y nadie menos. La primera vez que le dije a alguien sobre mi afición de “vestir de mujer” fue en febrero del 2017 y desde esa fecha empecé un recorrido para auto conocerme con ayuda de psicólogos y psiquiatras especialistas en el tema en la que me tomo casi un año encontrar un sentido de etiqueta propia. Desde enero del 2018 empecé mi terapia de remplazo hormonal y les puedo decir que es una chinga, pero me encanta verme al espejo y ver ese nuevo reflejo, un reflejo feliz, seis meses después salgo del closet por medio de Facebook con familiares y amigos, varios ya tenían conocimiento que estaba en este proceso mucho antes pero en ese momento deja de ser mi secreto o un rumorcito de los chismosos. Desde septiembre del 2018 salgo full time desde casa y trabajo, como amistades y reuniones familiares como la chica feliz que soy.
Me gustan las mujeres, el café con pan dulce por la mañana, las palomitas, las películas de súper héroes, series de Netflix, hace años me encantaban los video juegos, pero ahora me la paso programando todo el día, y le veo más sentido hacer eso, y uy, Twitter me encanta meterme ahí a chismear y decir lo que me pasa o pienso. Me gustan los animalitos y un tiempo tuve un perro salchicha al que llame Chicho, pero se murió por que tenia un problema en la espalda, pero ahora tengo dos tortugas sulcata que se llaman Chrome y Sphere.
Así que aquí estoy y esta es mi historia.